Como hemos comentado otras veces, los pasatiempos están relacionados con las matemáticas de muy diversas maneras. En muchos de ellos aparecen contenidos matemáticos, con lo que es evidente que es visible esa relación. Sin embargo, en otras ocasiones, quizás no queda tan claro que el que estamos trabajando se pueda considerar interesante para las matemáticas por no aparecer esos contenidos explícitos.
Pero no olvidemos que el principal interés que puede tener para el matemático los pasatiempos, es debido a que en su resolución se utilizan los mismos procedimientos que se deben utilizar en la resolución de problemas. Por ello, el trabajar pasatiempos en el aula es una manera muy atractiva de conseguir dominar esos heurísticos que se necesitan para resolver los problemas que nos encontramos en la enseñanza cotidiana.
Siguiente esta premisa, de vez en cuando incorporamos pasatiempos que, a simple vista, parecen de letras y que no tienen nada que ver con las matemáticas, pero son necesarios abordarlos con una estrategia lógica para poder llegar a su resolución.
Vamos hoy a incluir dos pasatiempos en los que partimos de una frase de la que han huido una serie de letras y que debemos colocar en su lugar correspondiente para poder entender el mensaje. Ambos están tomados del suplemento de pasatiempos de los dominicales del ABC.
En el primero, tomado del 31 de marzo de 1991, aparecen las letras ordenadas que se han extraido del mensaje. Hay que ir colocando las más evidentes, mientras se tachan del listado de letras fugadas.
La siguiente versión es algo más simple, pues en este caso sólo se han "fugado" del texto vocales. Lo recogimos en el diario del 23 de mayo de 1982.
